En el nombre de la Alhambra

La enorme elegancia del monumento nazarí no cabe en pequeños botes de perfume. Sin embargo, son miles los comercios por todo el mundo que aprovechan el tirón del castillo para dar un aroma 'distinto' a su empresa .

ARMANI, prendido por el legendario aroma que derrocha el más insigne de los monumentos granadinos, crea 'Oranger Alhambra'। Lo describe como «un trozo de paraíso en el mediterráneo con olores como el limón, la bergamota, el romero, el musgo y el jazmín»। Cuando lo tenían todo listo para espurrear el perfume se encuentran con un pequeño problema: olvidaron pedir permiso para usar el nombre.

Ambas palabras son dos nombres registrados por el Patronato de la Alhambra y el Generalife, que vela para que la imagen del archiconocido palacio nazarí no se vea afectada por un uso indebido de su nombre. Con el perfume decorando las estanterías de las droguerías de todo el mundo, la queja plantea una cuestión: ¿Dónde está el límite para emplear el monumento como gancho comercial?

Empecemos con las matemáticas. Prueben a realizar una simple búsqueda en 'Google'. La clave: Alhambra. Por supuesto, los primeros resultados están íntimamente relacionados con el castillo rojo. Pero el resto de las 20.800.000 entradas aparecidas guardan alguna que otra sorpresa. En España, las Páginas Amarillas tienen registradas 1.332 empresas llamadas 'Alhambra'. La mayoría, como era de esperar, en Granada con 232.

¿Jugamos?

Entre todas estas empresas tenemos ejemplos casi tan conocidos -al menos a nivel nacional- como el Seat Alhambra, un amplio monovolumen familiar, que pueden encontrar en el 'Concesionario Alhambra Motor', y, por supuesto, las sempiternas Cervezas Alhambra, que ya juegan con distintos brebajes: Especial, Negra, Sin, Star y, claro, la 1925. Hasta el momento, sin sorpresas.

En Granada va a comenzar la construcción de uno de los edificios más impresionantes de la Edad Media. Allí llegan constructores de todo el mundo dispuestos a desempeñar la tarea, erigiendo torres, estancias, fuentes y pabellones. Y usted es uno de ellos. Esa es la idea que guía al juego de mesa 'Alhambra', que dará la victoria al jugador que consiga construir la réplica más suntuosa y harmoniosa. Con una mecánica muy simple y pese a lo que podría parecer, el entretenimiento fue creado por el alemán Dirk Henn en 2003, año en el que recibió el premio a mejor juego de mesa del año.

Según explican desde la tienda granadina 'Freakmondo', «el juego es éxito de ventas en todo el mundo. En todo el mundo menos aquí, que apenas ha tenido aceptación».

Granada-Pekín

Uno de los usos más comunes del nombre nazarí está en el mundo de la restauración. Las Páginas Amarillas contemplan 129 locales en Granada, 42 en Madrid, 30 en Ciudad Real y 25 en Barcelona. Y es que leer 'Alhambra' parece que da seguridad a los turistas. Anthony y Susan Schmith vienen de Inglaterra. Disfrutan de su desayuno con vistas a la Catedral en la 'Cafetería Alhambra'. «Un sitio que se llame como su más preciado tesoro no puede ser malo, ¿no?» Muy cerca, ya en la plaza Bib-Rambla, en el Restaurante-Pizzería Alhambra preparan las mesas para los comensales. «Aquí la inmensa mayoría son extranjeros», aseguran.

Tampoco es tan sorprendente encontrarse un bar o restaurante o pub llamado Alhambra en España -y no digamos en Granada-. El mismo caso para los hoteles. Empezando por el 'Alhambra Palace', que reina en la falda del castillo, los hostales y residencias alhambreñas se cuentan por cientos en la península. También, más allá de nuestras fronteras. Posiblemente Anthony y Susan hayan visto alguna vez el 'Hotel Alhambra' situado en King Cross, en pleno centro de Londres. Si cruzamos el charco, más ejemplos: el 'Restaurante Alhambra', en Florida. El lugar idóneo para cenar después de ver una obra en el 'Teatro Alhambra' -homónimo del castizo granadino-. Sin salir de Estados Unidos, podríamos pasear por las calles Alhambra de Miami o San Francisco. Y si nos ponemos olímpicos, en la avenida Alhambra, en Pekín.

Variedad hasta el final

No hay límites para el marchamo 'Alhambra'. A ver qué tal la siguiente ruta: Usted se acaba de hacer con su nueva y flamante casa en la inmobiliaria almeriense 'Alhambra Holdings'. El color lo ha dejado en manos de 'Decoraciones Alhambra', una experta empresa de Alicante famosa por el lujo y originalidad de sus trabajos. Decide invitar a unos amigos extranjeros para que conozcan su hogar. Claro, no saben español. Podría llevarles a la 'Academia de idiomas Alhambra', en Málaga.

Resulta, que como es usted un gran anfitrión, quiere sorprender a sus amigos con algo de música tradicional. En 'Guitarras Alhambra', en Alcoy, son especialistas en construir instrumentos de calidad mundialmente reconocida.

Usted, que recibió una educación excepcional en el Colegio Alhambra, en Madrid, trae a invitados a la ciudad más bonita del mundo: Granada. Organiza todo un evento social perfectamente guiado por las 'Azafatas Alhambra' e iluminado por 'Luminosos Alhambra'. Melancólicos de su tierra, los extranjeros hacen una parada en el 'Locutorio Alhambra' para charlar con sus familiares y, de vuelta al 'Hotel Alhambra Palace' -donde se hospedan-, se hacen con los billetes de vuelta en la 'Agencia de viajes Alhambra'.

No hay duda de que 'Alhambra' es una musa que ha inspirado a miles de empresarios de todo el mundo. Y eso, pese a que escribir la palabra es harto complicado en los modernos procesadores de texto digitales que se empeñan en quitar la 'h' intercalada. Un problema que no les daría ningún quebradero de cabeza a los expertos en las tecnologías de información y comunicación de 'Alhambra soluciones y servicios informáticos', en el Parque Tecnológico de la Salud de Armilla.


Con perfume o sin el, el nombre nazarí viaja sin frenos. Llenando nuestras vidas con un recuerdo permanente de una de las principales maravillas del mundo -digan lo que digan-. Es como en aquella película en la que John Malkovich se reproducía a sí mismo sin medida ni control.

Al final, puede que haya muchas copias, pero la original es única e irrepetible y seguirá presente por toda la eternidad. No en vano, de eso se encargan en la 'Funeraria Alhambra'